Title in English:
Prevalence of Dentomaxillary Anomalies and Oral Bad Habits
in
in preschool children in
rural areas of the target population of the Health Service of Vina del
Mar/Quillota. 2011
Autores:
Angélica Espinoza R.
Ortodoncista Coordinadora de la Red de Ortodoncia Interceptiva
de la Unidad de Salud Oral del Servicio de Salud de Viña del
Mar-Quillota
Nicolás Parra.
Odontólogo General. Ejercicio Privado
Colaboradores:
Francisco Prieto. Jefe de la Unidad de Salud Oral del Servicio de Salud
de Viña del Mar-Quillota.
Cristián Fernández. Odontólogo Servicio de Salud de Viña del
Mar-Quillota.
Verónica Venegas Odontólogo Servicio de Salud de Viña del Mar-Quillota.
Abstract:
Bad oral
habits can affect the orofacial development,
which
manifest clinically as
dentomaxillary anomalies (DMA).
In the field of
dental problems
DMA are
the third
most common disorder of oral health nationwide so
far, however, more research on this topic needs to be undertaken in
rural areas.
The aim of this research is
to determine the prevalence of DMA and oral bad habits in preschool
children in rural areas of the target population of the Health Service
of Vina del Mar-Quillota
(HSVQ).198
children between 3 and 5 years in full temporal dentition,
who attended JUNJI’s nursery schools
in rural areas in Hijuelas,
Olmué,
Puchuncavi, Petorca. They
were clinically examined using a clinical record designed for this
study. 51.5% (102cases) of the sample showed some DMA, 31.3% of which
were caused by caries and 29,3% by
ADM
trappable,
being
the most common
open
jaw bites (13.6%),
crossbites and vis a vis(11.1%)
and distoclussion(9.1%).
Of all children who
presented trappable DMA (58 cases), a 93.1% had oral bad habit.
The most prevalent Oral
Bad habits were suction
(79.3%),
mixed breathing (58.1%)
and
thrusting (56.6%).
The findings of the current study,
high prevalence of
DMA
and bad
habits,
are consistent with those obtained
in La Calera (suburban)
and the metropolitan area
(urban area).
One of the issues that emerges from these findings is the
need to implement preventive and interceptive measures through
orthodontics programs that can becarried out in the primary care
services.This
research was conducted by the Oral Health Unit SSVQ.
Resumen:
Los malos hábitos bucales pueden alterar el desarrollo orofacial,
manifestándose clínicamente como Anomalías Dentomaxilares (ADM). Dentro
de las problemáticas odontológicas las ADM constituyen el tercer
problema más prevalente de salud bucal a nivel nacional, sin embargo la
situación rural del país es un tema que aún queda por resolver, pues no
ha sido bien determinada a diferencia de zonas suburbanas y urbanas. El
Objetivo fue determinar la prevalencia de ADM y Malos Hábitos en los
preescolares de zonas rurales de la población beneficiaria del Servicio
de Salud de Viña del Mar-Quillota (SSVQ). 198 niños de 3 a 5 años en
dentición temporal completa, pertenecientes a jardines infantiles JUNJI
de zonas rurales de Hijuelas, Olmué, Petorca y Puchuncaví fueron
examinados utilizando una ficha clínica realizada para este estudio. El
51,5% (102 casos) de la muestra presentó alguna ADM, del cual un 31,3%
fue por caries y un 29,3% a ADM interceptables, siendo las más
frecuentes las mordidas abiertas (13,6%), mordidas cruzadas y en vis a
vis (11,1%) y distoclusiones (9,1%). Del total de niños que presentaron
ADM interceptables (58 casos) un 93,1% tenía asociado un mal hábito
bucal. Los malos hábitos bucales más prevalentes fueron succión (79,3%),
respiración mixta (58,1%) e interposición lingual (56,6%).La alta
prevalencia de ADM y Malos hábitos en estas zonas rurales es semejante a
lo encontrado en La Calera (zona suburbana) y la Región Metropolitana
(zona urbana). Ante estos resultados se crea la necesidad de implementar
medidas preventivas e interceptivas a través de programas de ortodoncia
que se puedan instaurar en los servicios de atención primaria. Esta
investigación fue efectuada por la Unidad de Salud Oral del SSVQ.
Key words:
Malocclusion, oral habits, temporal dentition.
Palabras Clave:
Maloclusiones, malos hábitos orales, dentición temporal.
Trabajo de Investigación
Introducción
Según Dockrell en el proceso de crecimiento y desarrollo de los
maxilares de un individuo pueden verse alterados los patrones de
normalidad por las siguientes causas: hereditarias, del desarrollo (de
origen desconocido), traumas, agentes físicos, hábitos, enfermedad y
malnutrición. Así pueden originarse las denominadas anomalías
dentomaxilares (ADM) o también llamadas maloclusiones, las que son
habitualmente variaciones clínicamente significativas del crecimiento y
morfología más allá de la fluctuación normal (1).
Según la Organización Mundial de la Salud, las maloclusiones representan
la tercera prevalencia entre las enfermedades bucales, después de caries
y enfermedad periodontal.
Como resultado de las políticas de salud oral implementadas y la acción
del Flúor incorporado a los abastos de agua potable de la quinta región,
en la población beneficiaria del Servicio de Salud de Viña del
Mar-Quillota (SSVQ) el evento caries ya no constituye el principal
problema de salud oral, estableciéndose como prioridad de atención la
Enfermedad Periodontal y ADM, que según Soto et al. (2), presentan una
prevalencia del 52,5% en niños de 12 años a nivel nacional.
Como se ha mencionado anteriormente, dentro de los factores etiológicos
de las ADM encontramos los Malos Hábitos Bucales, que si se mantienen
más allá de los 3 años de edad, pueden causar deformaciones en los
huesos maxilares y dientes, provocando alteraciones funcionales, de la
estética facial, trastornos emocionales, alteraciones de otros sistemas
del organismo y problemas de aprendizaje. Lo que hace que este problema
de salud es el más percibido por la familia, traduciéndose en una gran
demanda de consultas a especialistas en el Sistema Nacional de Servicios
de Salud (3).
Con el objeto de anticiparse al daño, el odontólogo general debería
tener conocimientos de los malos hábitos de actividad oral, para poder
prevenirlos en forma temprana a través de la promoción y educación e
implementar procedimientos que permitan prevenir e interceptar para
evitar la progresión de ADM (3).
Los tratamientos interceptivos presentan en común las siguientes
características (3):
·
Se realizan en niños con dentición temporal y mixta primera fase en
clase I basal.
·
Son de corta duración (máximo de seis a ocho meses).
·
Son efectivos.
·
Son estables en el tiempo.
·
Acciones y elementos a usar son de poca complejidad.
·
Bajo costo de tratamientos.
En el contexto de las inequidades en Salud, la población de sectores
rurales presentan las mayores barreras de acceso a las atenciones de
Salud. Por esta razón, el SSVQ está desarrollando una estrategia
tendiente a implementar una política que potencia las actividades de
ortodoncia interceptiva, a realizar por los odontólogos generales de la
red odontológica de atención primaria (APS), con el objeto de prevenir e
interceptar el desarrollo de patologías específicas. Por lo que es
necesario determinar la prevalencia de ADM y Malos hábitos en
preescolares de zonas rurales, siendo este el objetivo de este estudio.
Material y Método
Se realizó un estudio de tipo descriptivo-transversal, para el cual se
confeccionó una ficha clínica ad hoc para registrar los datos
requeridos.
El universo de esta investigación estuvo formado por 198 niños de
jardines infantiles JUNJI de las zonas rurales de Hijuelas, Olmué,
Petorca y Puchuncaví pertenecientes al Servicio de Salud de Viña del
Mar/ Quillota. Se consideraron a niños de ambos sexos, con un rango
etáreo de 3 a 5años de edad, que tuvieran dentición temporal completa, y
que no tuvieran síndromes y/o enfermedades sistémicas. La muestra fue
seleccionada al azar. Se consideró, para la clasificación:
I.-De anomalías dentomaxilares:
a.
La relación de las arcadas dentarias en los 3 planos del espacio:
·
Sentido Vertical: mordidas abiertas y sobremordidas.
·
Sentido Transversal: mordidas cruzadas y en vis a vis.
·
Sentido Sagital: mordida invertida, relación canina, relación distal de
segundos molares.
b.
Pérdida de tejido dentario por caries.
II.- De malos hábitos bucales:
a.
Succión de dedo, chupete y mamadera.
b.
Respiración Mixta.
c.
Interposición lingual en reposo, deglución y fonoarticulación.
d.
Interposición labial
e.
Onicofagia.
Se tomó en consideración a las anomalías dentomaxilares interceptables
señaladas en las Normas Nacionales de Intercepción del Minsal
1998.Previo a la evaluación se realizó la calibración de cuatro
evaluadores de acuerdo con las indicaciones de la OMS, lográndose un
porcentaje de concordancia de un 95%. Cada niño fue sometido a un examen
clínico extra e intraoral, bajo las mismas condiciones establecidas
previamente
Análisis de la información:
El análisis estadístico fue realizado con Test exacto de Fisher a través
del programa Stata 12.
Resultados
El total de la Muestra estuvo constituida por 198 niños de ambos sexos,
con edades de 3 a 5 años.
Un 49.5% del total de la muestra fue sexo femenino y un 50.5% sexo
masculino (tabla 1).
Los niños de 3 años representaron el 56,1% del total de la muestra, un
37,4% los de 4 años y un 6,5% los niños de 5 años (tabla 2).
De los 198 niños evaluados, 102 niños presentaron ADM que representa un
51,5% de la muestra, mientras que 96 niños no presentaron ninguna ADM lo
que representan el 48,5% (Gráfico 1).
ADM por pérdida parcial de tejido debido a caries 62 niños, lo que
representa un 31,3% del total de la muestra. La zona rural que presentó
la tasa de prevalencia más alta por caries es Olmué con un 42%, seguido
de Puchuncaví con un 36,5%, luego Petorca con un 29,7%, y finalmente,
Hijuelas con un 16,6% (tabla 3).
Del total de la muestra, 58 niños presentaron alguna ADM interceptable
lo que constituye un 29,3%. Puchuncaví fue la zona rural que obtuvo la
tasa de prevalencia más alta de anomalías con un 34,9%, sigue Petorca
con un 29,7%, Olmué con un 28% e Hijuelas con un 22,9% (tabla 4).
La mordida abierta fue la anomalía más prevalente con un 13,6%, seguido
por las mordidas cruzadas y en vis a vis con un 11,1%, de las
distoclusiones con un 9,1 %, y un 4,5% para las mordidas invertidas y
sobremordidas (Tabla 5).
Los niños de 5 años presentaron la mayor cantidad de ADM interceptables,
con un 46,2% de prevalencia, los sigue los niños con 4 años con un 37,8%
y por último los niños con 3 años con un 21,6% (Tabla 6).
Según el sexo de la muestra, las mujeres fueron las que tienen más
anomalías con un 34,7%, respecto a los hombres que tienen un 24 % (Tabla
7).
Respecto a la prevalencia de malos hábitos bucales un 91,1 % de la
muestra presentó alguno de ellos. De acuerdo a la edad de los niños
evaluados, se observa que a los 3 años es donde la prevalencia de malos
hábitos bucales fue mayor con una tasa de un 92,8 %, la cual disminuye a
los 4 años con un 90,1% y vuelve a aumentar a los 5 años con un 92,3%
(Tabla 8).
El mal hábito bucal más prevalente en los niños examinados fue el de
succión con un 79,3%, seguido de la respiración mixta con un 58,1%,
interposición lingual con un 56,6%, onicofagia un 22,2% y finalmente
interposición labial con un 1,5% (Tabla 9). La succión de Mamadera se
presentó en un 57,1% del total de la muestra, en segundo lugar la
succión de dedo con un 50%, y por último el chupete con un 16,2% (Tabla
10).
De los niños con ADM interceptables presentes, el 93,1% de ellos
presentó algún mal hábito, mientras que sólo el 6,9% de ellos no mostró
malos hábitos bucales (Tabla 11).Se aplicó Test Exacto de Fisher entre
los grupos con malos hábitos presentes y ausentes, observándose un
p=0,214, lo que indica que no existen diferencias significativas entre
los grupos.
Discusión
Existe escasa información sobre la situación de salud que hay en zonas
con características rurales en el ámbito de Malos Hábitos y Anomalías
Dentomaxilares (ADM). La mayoría de estos datos epidemiológicos proceden
de la región metropolitana (3), de manera que se hace más difícil
realizar comparaciones con otros estudios similares debido a que las
características de las poblaciones son distintas, los criterios
diagnósticos de las distintas investigaciones están poco definidos y las
edades estudiadas son diferentes.
En la presente investigación se encontró que un 51,5% de la Muestra
total conformada por 198 niños preescolares (entre 3 y 5 años)
presentaba por lo menos una ADM, que se asemeja mucho al 52,5%
encontrado a nivel nacional por Soto et al. (2) en niños de 12 años. En
la Edad preescolar no se expresan en su totalidad las ADM, se esperaría
tener un menor porcentaje en comparación a los 12 años donde las
anomalías ya están establecidas ya sea por causas genéticas o
ambientales (malos hábitos).
El alto porcentaje encontrado en este estudio de ADM, se debe a que
muchas corresponden a anomalías por pérdida de tejido debido a caries
que constituye un 31,3% de la muestra total, siendo Olmué( Lo Narvaez)
la zona que presenta la mayor tasa de prevalencia por caries con un 42%
(tabla 3). Estos resultados son muy superiores al 4,7% entregado por el
único dato estadístico relacionado al área de Viña del Mar/Quillota, que
fue realizado por el estudio de Bustos A. et al. (4) el año 2002 en La
Calera en niños con 4 y 5 años, podría sugerir que la ruralidad, es
decir, niños con mayor vulnerabilidad, difícil a acceso al Sistema de
Salud y un menor nivel educacional y socio-económico provocaría estos
altos porcentajes de anomalías por caries. Sin embargo en un estudio
realizado sobre una población también con características rurales el año
2001 por Labranque R., et al. (5) en niños de 5 y 6 años, la prevalencia
de anomalías por caries fue sólo de un 1,7% de prevalencia.
Respecto a la prevalencia de ADM del tipo Interceptables, se encontró
que un 29,3% del total de la Muestra (tabla 4). La misma prevalencia
encontró Carreño S. et al. (6) el año 2005 en niños de 2 a 6 años con
dentición temporal completa en el área Sur de la región metropolitana.
Estos resultados son inferiores a lo encontrado en una zona rural por
Labranque R. et al. (5) quienes presentaron una tasa de prevalencia del
65,2%, puesto que también incluyeron niños con dentición mixta lo que
provocó el aumento de este valor. Cabe destacar que de las 4 áreas
rurales examinadas Puchuncaví fue la que obtuvo la mayor prevalencia de
este tipo de anomalías con un 34,9%.
La mordida abierta fue la anomalía interceptable más prevalente con un
13,6%, seguido por las mordidas cruzadas y/o
en vis-vis con un 11,1%, un 9,1% para distoclusiones, y un 4,5%
de mordidas invertidas y sobremordidas (tabla 5). Estos resultados son
muy similares al entregado por el estudio de La Calera de Bustos A. et
al. (4) quienes encontraron a la mordida abierta como más prevalente con
un 11,7% y a las mordidas invertidas en menor porcentaje con un 2%. En
la región Metropolitana Carreño S. et al. (6) y Agurto et al. (7)
también indicaron como anomalía interceptable
más prevalente a la mordida abierta en estudios realizados en el
área Norte y Sur de la región metropolitana respectivamente. Sin embargo
en 1999 en otro estudio realizado por Agurto et al (8). en el área
Oriente de Santiago en niños de 3 y 6 años con dentición temporal
completa encontraron que la ADM más prevalente era la distoclusión con
un 38%, seguido de la mordida cruzada con un 28% y la mordida abierta
con un 16%.
Según la edad de la muestra se pudo observar que los niños con 5 años
son los que tienen más ADM Interceptables con un 46,2% de prevalencia,
los siguen los niños con 4 años con un 37,8% y por último los niños con
3 años con un 21,6% (Tabla 6). Alvarez F. et al. (9) el año 2000 en un
estudio con niñas de 4 a 9 años en Santiago también observa que a mayor
edad aumenta la frecuencia de ADM, que se asemeja también a lo
encontrado por R. Labranque et al. (5) el año 2001 en una población
rural.
Respecto al sexo de la muestra las mujeres son las que tienen más ADM
interceptables con un 34,7%, respecto a los hombres que tienen un 24 %
(tabla 7). En el estudio realizado en La Calera por Bustos A., et al (4)
en niños de 4 y 5 años se encontraron resultados similares, sin embargo,
Gacitúa G. et al. (10) el año 2001 en niños de 6 y 9 años en el Área
Norte de Santiago encontraron que los hombres presentaban mayor
porcentaje de anomalías respecto a las mujeres, con un 59,1% y 40,8%
respectivamente. Estas diferencias se pueden atribuir a las distintas
edades de la muestra de cada estudio.
En el estudio de los malos hábitos bucales se observó que un 91,9% de la
muestra posee por lo menos un mal hábito bucal y que su prevalencia de
los 3 a los 5 años se mantiene (Tabla 8). Este elevado porcentaje
encontrado es un reflejo de la falta de educación por parte de la
población estudiada quienes desconocen la existencia de Malos Hábitos
que en edades superiores a los 2,5
años son nocivos para el desarrollo del
Sistema Estomatognático. Al comparar esta prevalencia con el área
Norte y Sur de la región metropolitana no se observan muchas
diferencias. El año 2001 en el área Norte de la región Metropolitana, en
niños de 6 a 9 años de nivel socioeconómico bajo, Gacitúa G. et al. (10)
observaron que el 87% de los niños presentó algún mal hábito. El año
2006 en el área Sur de la región Metropolitana, Carreño S. et al.. (6)
en niños de 2 a 6 años encontraron un 90,3% de prevalencia en malos
hábitos. Estos resultados difieren a lo encontrado en el Área Oriente de
Santiago en 1999 por Agurto et al. (8) quienes encontraron una
prevalencia menor de malos hábitos con un 66% en niños de 3 a 6 años con
dentición temporal completa.
En esta investigación el mal hábito bucal más presente en los niños
examinados es el de succión con un 79,3%, seguido de la respiración
mixta con un 58,1%, interposición lingual con un 56,6%, onicofagia un
22,2% y finalmente interposición labial con un 1,5% (Tabla 9). Agurto et
al. (8) en el Área Oriente de Santiago, también encontraron a la succión
(62%), respiración bucal (23%) e interposición lingual (15%) como malos
hábitos bucales más prevalentes. Es importante mencionar que en este
estudio el principal tipo de succión encontrada fue la de mamadera con
un 57,1% del total de la muestra (Tabla 10), esto se correlaciona con la
alta tasa de prevalencia de mordidas abiertas observadas, lo cual
confirma lo descrito en la literatura. El mal hábito de respiración se
clasificó como Mixta, porque siempre existe un grado de permeabilidad
por lo que la respiración es nasal y preferentemente bucal,
y es por eso también que presentó un elevado porcentaje en esta
investigación respecto al 4,5% encontrado por Carreño S. y Calderón N
(6).
El 93,1% de los niños que presentaron alguna anomalía interceptables
presentó por lo menos un mal hábito bucal, se puede sugerir que existe
cierto grado de correlación (tabla 11). Sin embargo, al aplicar análisis
estadístico, Test Exacto de Fisher, se observó que dentro del grupo de
niños con anomalías , no se observó diferencias significativas entre los
niños con malos hábitos bucales presentes y ausentes (p=0,214). El mal
hábito no es un factor etiológico absoluto de las ADM, pero si se puede
considerar como un factor causal o predisponente.
También es importante considerar que la tasa de prevalencia de ADM
interceptables de un 29,3% es inferior al 91,9% de la población que
presentó malos hábitos. Esto indica que hay una gran parte de la muestra
estudiada que presenta malos hábitos pero que no posee una anomalía, por
esta razón, se vuelve importante conocer
la frecuencia, intensidad y duración del mal hábito para
determinar si logra alterar el
desarrollo normal del Sistema Estomatognático, características que no
fueron medidas en esta investigación debido a que es un estudio de tipo
transversal, y en edades temprana .Además ciertos factores del niño como
estado nutricional o la calidad del tejido óseo también juegan un rol en
la susceptibilidad de desarrollar ADM (11).
Conclusiones
El Gran porcentaje de Anomalías Dentomaxilares (ADM) presentes en la
muestra con un 51,5%, se debió a que un gran porcentaje de ADM son por
pérdida de tejido debido a caries con un 31,3%.
El porcentaje de ADM de esta muestra con un 29,3% no difiere en gran
cantidad a los porcentajes encontrados en La Calera y en la región
Metropolitana.
La mayor cantidad de ADM interceptables presentes en la muestra se
observó en las niñas y en los que poseían mayor edad, siendo la mordida
abierta la más prevalente con un 13,6%.
Existe un 91,1% de Malos hábitos en la muestra. El mal hábito de Succión
es el más prevalente con un 79,3% y su distribución que presentó en
distintas edades fue homogénea, siendo la succión de dedo la más
prevalente.
El 93,1% de los niños que presentaron alguna ADM interceptable, presentó
por lo menos un mal hábito bucal. El mal hábito no actúa como un factor
etiológico absoluto de las ADM, pero si se puede considerar como un
factor causal o predisponente.
La alta prevalencia encontrada de Anomalías Dentomaxilares y Malos
hábitos en zonas rurales es semejante a lo encontrado en zonas
suburbanas como La Calera y zonas urbanas como La Región Metropolitana.
Ante estos resultados se crea la necesidad de implementar medidas
preventivas e interceptivas a través de programas de ortodoncia que se
puedan instaurar en los servicios de atención primaria.
Bibliografía
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(11)
Vellini- Ferreira F.
Ortodoncia. Diagnóstico y planificación Clínica. 1º Edición. Capitulo
12. Pág 235-240. Editorial Ates médicas.2002.
Tablas:
Tabla 1.-
Distribución de la muestra según Sexo.
Tabla 1 |
|
Nº de casos |
Tasa de Prevalencia |
Femenino |
98 |
49,5% |
Masculino |
100 |
50,5% |
Total de la muestra |
198 |
100% |
Tabla 2.-
Distribución de la Muestra por Edad.
Tabla 2 |
|
Nº de casos |
Tasa de prevalencia |
3 años |
111 |
56,1 % |
4 años |
74 |
37,4 % |
5 años |
13 |
6,5 % |
Total de la muestra |
198 |
100% |
Gráfico 1.-
Prevalencia de Anomalías Dentomaxilares (ADM) presentes en la Muestra.

Tabla 3.-Prevalencia
de ADM por caries presentes en la Muestra.
Tabla 3 |
|
Nº de Casos |
Tasa de Prevalencia |
Muestra |
Hijuelas |
7 |
14,6% |
48 |
Olmué |
21 |
42,0% |
50 |
Petorca |
11 |
29,7% |
37 |
Puchuncaví |
23 |
36,5% |
63 |
Total |
62 |
31,3% |
198 |
Tabla 4.-Prevalencia
de ADM interceptables presentes en la Muestra.
Tabla 4 |
|
Nº de Casos |
Tasa de Prevalencia |
Muestra |
Hijuelas |
11 |
22,9% |
48 |
Olmué |
14 |
28,0% |
50 |
Petorca |
11 |
29,7% |
37 |
Puchuncaví |
22 |
34,9% |
63 |
Total |
58 |
29,3% |
198 |
Tabla 5.-
Distribución del tipo de Anomalías dentomaxilares con respecto al total
de la muestra.
Tabla 5 |
|
Nº de Casos |
Tasa de Prevalencia |
Mordida Abierta |
27 |
13,6% |
Mordidas cruzadas y Vis-Vis |
22 |
11,1% |
Distoclusiones |
18 |
9,1% |
Mordida invertidas |
9 |
4,5% |
Sobremordida |
9 |
4,5% |
Tabla 6.-Prevalencia
de ADM interceptables según la Edad de la Muestra.
Tabla 6 |
|
Muestra |
Nº de Casos |
Tasa de Prevalencia |
3 años |
111 |
24 |
21,6% |
4 años |
74 |
28 |
37,8% |
5 años |
13 |
6 |
46,2% |
Tabla 7.-
Prevalencia de ADM Interceptables según el Sexo de la Muestra.
Tabla 7 |
|
Muestra |
Nº de Casos |
Tasa de Prevalencia |
Femenino |
98 |
34 |
34,7% |
Masculino |
100 |
24 |
24,0% |
Tabla 8.-
Prevalencia de Malos Hábitos Bucales y distribución de estos según la
edad de la Muestra.
Tabla 8 |
|
Nº De Casos |
Tasa de Prevalencia |
Muestra |
3 años |
103 |
92,8% |
111 |
4 años |
67 |
90,1% |
74 |
5 años |
12 |
92,3% |
13 |
Total |
182 |
91,9% |
198 |
Tabla 9.-
Prevalencia de Distintos Malos Hábitos Bucales respecto al total de la
Muestra.
Tabla 9 |
|
N°de Casos |
Tasa de Prevalencia |
Succión (chupete,
mamadera, dedo) |
157 |
79,3% |
Respiración Mixta |
115 |
58,1% |
Interposición Lingual
(reposo, deglución, fonoarticulación) |
112 |
56,6% |
Onicofagia |
44 |
22,2% |
Interposición Labial |
3 |
1,5% |
Tabla 10.-
Prevalencia de los distintos tipos de Succión respecto al total de la
muestra.
Tabla 10 |
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N° de Casos |
Tasa de Prevalencia |
Mamadera |
113 |
57,1% |
Dedo |
99 |
50% |
Chupete |
32 |
16,2% |
Tabla 11.-
Relación entre la presencia de Anomalías Intermaxilares y ausencia o
presencia Malos Hábitos Bucales.
Tabla 11 |
|
Anomalía Intermaxilar
Presente |
|
Nº de Casos |
Tasa de Prevalencia |
Mal Hábito Ausente |
4 |
6,9% |
Mal Hábito Presente |
54 |
93,1% |
Total |
58 |
100% |
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